domingo, 3 de julio de 2016

Pasado aguado

No puedo salir de mi asombro al ser testigo mudo de una lágrima sin augurio que emerge de entre las sombras,encandenada a la suerte de unos cuántos carroñeros que destripan pedazos rotos de la carnaza servida en bandeja de plata.Ya sabe el refrán su etapa final.

Equidistante se encuentra aquel dilema que dió el todo por el todo para conjugar la duda inapreaciable por la mayoría absoluta; de la gentileza al incivismo poco intelectual no hay pautas a seguir...

Horna de su zapato entre telas de hilo único;especimen raro hallado pernoctando y sollozando sin nada más que lo propio.No beberían sus labios de fuentes ajenas a su propiedad platónicamente ensimismada ante su presencia.

...Aquel día como el de tantos en que la rutina carecía de significado inherente a su mentalidad.