Recreo

Pensamientos:"aquella partida mereció la pena".Surgen nuevos retos literarios por tópicos al cuadrado;así;sin más compañía que la de una hoja en blanco esperando releer la historia si tuviese en consideración la hora que era y aún sin terminar.

Siete de la tarde; radiante otoño,bucólico y nostálgico a raudales.Al fin; apoyada en el quicio de la puerta posa su mirada en la escena de un preludio sin código ético ni moralista.

Su postura era inconfortable pero podía concebirla como apta ;ya habría momentos de masajes cosquilleantes.

Detalles; embellecen su sonrisa aún más;le entusiasmaba la vara de dulces nardos que portaba en su mano derecha pero aquello sólo era un actor secundario.

Abarata el saludo;ocultos en el callejón de la desmemoria.

Romancero...

"Parafraseando"

Todo aquello que devuelve su plenitud,inquieta y ansiosa por naturaleza sonriente, extraodinaria elocuencia;elegante y de exiquisitos modales.Conformaría sin duda la solución idónea para según qué músicas.

Guían su andadura trazos insólitos; hasta la fecha su mente jamás hubiese aceptado escoger el camino impenetrable,quizá por lo que implicaba aquel reloj sin minutero o por su requerimiento en zona uno.

Nadie tiene la capacidad divisoria que posee por sí mismo;adivino de refranes y acertijos inteligibles,conocedor de secretos y otros tantos manuscritos de puño y letra desgastado entre eternas madrugadas.

Me atrevería a decirte el susurro ronroneante que apura sus últimos rayos de sol en aquella laguna plateada;sería consciente la sinrazón de esta tesitura que a priori parece sencilla.

Conjeturas...,gritos y giros que afirman ser gargantas profundas de la nada.Qué ilusa tristeza ensombrece el pasaje, surgido a media noche sin más compañía que la de el aullido de siempre.

Posiblemente sea el argumento más zafio y rastrero que llegase a sus oídos,mas prevalece el factor sorpresa que atesora...

Un nuevo reto apasionante.

Huellas...

Bla,bla,bla y más bla; muy cierta es aquella elocuencia de un genio que pasa desapercibido ante las risas de hipócritas y exabruptos varios.

Quiera el segundo transfigurar la eterna conversación que mantiene con alguien a quién llamaremos por su apodo x;signos perdurables de señales pasadas de tiempos impretéritos que cobijaron todo tipo de artilujios únicos en su género.

No desea ni puede obviar la evidencia; jamás desertaría de aquella misión encomendada por la madrugada descocada y alborada por luces y matices.

Riachuelo de refinadas maneras con caudal suficiente para dar y saciar más de una sed;arde en el corazón lloroso desilusiones de una escapatoria planificada al más mínimo detalle de un milímetro,caprichoso verbal.

Inspira aires distintos con nuevos retos e ilusiones por cumplir la promesa de aquella tierra prometida entre danzas y cánticos inpronunciables.
Firmado
"Locuras de una coherencia."