Convivir día a día entre la soledad y la compañía mental de pensamientos que pasan sin permiso para herir mortalmente las llagas del alma rota en medio de una marabunta de aplausos imaginarios que terminan la tarea pendiente.
Desamparo y abandono de ausencias sin presencia alguna en el rotundo ahora; piezas de un puzzle desencajado,esparcido cual ceniza sin apellido al mar del vacío más absoluto encorsetado en otro tiempo; sin prejuicio ni valor que la propia ecatombe.
Preámbulo de lágrimas que gota a gota convierte en gritos de socorro a quién tenga un corazón dotado;suena el piano malherido;notas recogidas por alguien que sube a la habitación del pánico dispuesto a besar al miedo que espera sigilosamente.
Todo aquel tinglado planeado de formas poco ortodoxas,mente maquiavélica;ni al mejor guionista podría ocurrirle tal idea que califica de extraordinariamente perfecta.Pero siempre llega el día...
Arranca las cadenas de la putrefacta sociedad capitalista que intenta ser quién no es.
Libera tu conciencia de pensamientos,obras u omisiones negativas en tu cotidianidad.
Recuerda quién y no quién has de ser para.No te estanques en la mediocridad; somos más que un instrumento de usar y tirar.
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